FAO: Reporta baja generalizada de precios de alimentos en enero.

Descenso de los precios del trigo y el maíz marcaron la disminución del índice de precios de alimentos de la FAO en el primer mes del año 2024.

El índice de precios de los alimentos de la FAO se situó en 118,0 puntos en enero de 2024, lo que supone un descenso de 1,2 puntos (un 1,0 %) respecto de su nivel revisado de diciembre, ya que el descenso de los índices de precios de los cereales y la carne compensaron con creces el aumento del índice de precios del azúcar, mientras que solo se registraron ligeros ajustes en los de los productos lácteos y los aceites vegetales. El índice se situó 13,7 puntos (un 10,4 %) por debajo de su valor de hace un año.

El índice de precios de los cereales de la FAO registró en enero un promedio de 120,1 puntos, esto es, 2,7 puntos (un 2,2 %) menos que en diciembre y 27,4 puntos (un 18,6 %) por debajo de su valor de enero de 2023. Los precios mundiales del trigo para la exportación bajaron en enero, impulsados por la fuerte competencia sostenida entre los países exportadores y la llegada de suministros recién cosechados a los países del hemisferio sur.

Los precios del maíz para la exportación disminuyeron bruscamente respecto del mes anterior, como consecuencia de la mejora de las condiciones de los cultivos y el inicio de la cosecha en la Argentina, así como a raíz de la mayor oferta en los Estados Unidos de América tras una revisión al alza de las estimaciones de su producción. Paralelamente a los precios del trigo y el maíz, en enero también bajaron los precios mundiales de la cebada y el sorgo. Por el contrario, el índice de precios de la FAO para todos los tipos de arroz aumentó otro 1,2 % en enero, fundamentalmente a causa de una subida de los precios del arroz índica de mayor calidad debida al ritmo dinámico de los envíos del Pakistán y Tailandia y a las compras adicionales por parte de Indonesia.

El índice de precios de los aceites vegetales de la FAO registró en enero un promedio de 122,5 puntos, con un ligero aumento de 0,2 puntos (un 0,1 %) respecto del mes anterior, pero aun así se encuentra 17,9 puntos (un 12,8 %) por debajo de la lectura de enero de 2023. La estabilidad intermensual del índice de precios reflejó los efectos combinados del aumento de los precios mundiales de los aceites de palma y girasol que contrarrestó la disminución de las cotizaciones de los aceites de soja y colza. Los precios internacionales del aceite de palma subieron de forma moderada en enero, fundamentalmente debido al descenso estacional de la producción en los principales países productores y a la preocupación por las condiciones atmosféricas desfavorables en Malasia.

Por su parte, las cotizaciones mundiales del aceite de girasol evolucionaron al alza, impulsadas por el aumento de la demanda de importaciones, en particular por parte de Turquía. Por el contrario, bajaron los precios internacionales de los aceites de soja y colza, como consecuencia de unas perspectivas de abundantes suministros en América del Sur y la persistente amplitud de disponibilidades en Europa, respectivamente.

El índice de precios del azúcar de la FAO se situó en enero en un promedio de 135,3 puntos, esto es, 1,1 puntos (un 0,8 %) más que en diciembre y 18,5 puntos (un 15,9 %) por encima del valor alcanzado hace un año. El aumento de los precios mundiales del azúcar obedeció principalmente a la preocupación acerca de los probables efectos de las precipitaciones por debajo de lo normal en el Brasil en los cultivos de caña de azúcar que se recogerán a partir de abril, sumada al comienzo lento de la nueva campaña y a unas perspectivas desfavorables sobre la producción en la India y Tailandia, dos de los principales países productores. Sin embargo, la abundancia de suministros derivada de las cosechas que acaban de terminar y la menor rentabilidad de las ventas de etanol en el Brasil, junto al debilitamiento del real brasileño frente al dólar de los EE.UU., contribuyeron a limitar el aumento intermensual de los precios mundiales del azúcar.