Una pequeña Candice Muxfeldt veía a su padre trabajar con pasión en el campo y eso la inspiró a seguir el mismo camino. Hoy, con sus 48 años siendo esposa y madre de familia, gerencia una empresa familiar agropecuaria que se ubica en Agua Dulce, Chaco Paraguayo.
“Desde pequeña ya me gustaba” respondió Candice hablando con agropecuaria y negocios sobre por qué decidió dedicarse a la producción.
“La verdad desde pequeña me gustaba ver la pasión con que mi papá trabajaba en el rubro (…) yo creo que él le ponía mucho empeño y amor, y me enseñó a estar muy orgullosa también del Paraguay” comentó, al recordar que fue su padre quien le hizo ver todo el potencial que había por explotar en el sector y todo lo que había por hacer.
Sobre su evolución como productora, Candice recuerda que empezó en Alto Paraná con la empresa familiar a cargo de su padre. Ella asegura que nunca se sintió incómoda en sus intervenciones en las faenas de campo.
Recuerda que de niña nunca sintió que por ser mujer llevara desventaja, porque en su familia, la opinión de todos era importante. “Siempre me escuchaba, tanto a mí, como a mi hermano varón, para él (su padre) nuestra opinión era válida, nuestro esfuerzo era igual, yo nunca sentí esa dificultad que la mujer sufre”, celebró, recordando a su familia.
“Recién al entrar a la facultad empecé a sentir cierta dificultad y preconceptos que las personas tienen hacia las mujeres”, recordó Candice al hablar con agropecuaria y negocios, pero enfatizó que siguió estudiando y trabajando “siempre demostrando seguridad ante lo que uno va aprendiendo y aportando al sector”.
Respondiendo a la herencia: la pasión por el campo.
Ya profesional, casada, Candice estableció su familia con su esposo, quien también es ingeniero agrónomo, en Alto Paraná. “Somos colegas y nos apoyamos siempre, yo creo que por eso no tuve tanta dificultad”, dijo.
Ella recuerda que le costaba mucho visitar la ciudad “tanto amo el campo que yo estaba en mi lugar feliz, yo no quería volver más a la ciudad”, recuerda, mencionando que para la realización de trámites tenía que gerenciarse como profesional y madre para llegar hasta la Capital.
“Sí me costaba coordinar las citas médicas, los controles, venir a Asunción para continuar con la burocracia” decía al mencionar las cuestiones que hacían imposible evitar los viajes.
“Allá teníamos nuestra vida, pero después, la vida, nos trajo de vuelta hacia Asunción” recordó resignada Candice, que en éste punto de la entrevista ya dejó en claro su preferencia por la vida en el campo.
A la par de esa necesidad de mudanza fue que surgió la posibilidad de establecer un negocio pecuario en el Chaco, “mi hermano ya estaba en el Chaco, en Agua Dulce, entonces tomamos esa posibilidad que estábamos esperando hacia mucho”, recordó.
Después de comentar lo que le costó adaptarse al ritmo de la ciudad, Candice afirmó “hoy se puede decir que soy citadina de vuelta, cuando mis hijos estén en la facultad ojalá pueda volver”, dijo mencionando su intención de vivir en el interior del país.
Innovar en el negocio
Una de las mayores satisfacciones para Candice fue la renovación del sistema contable-fiscal en la empresa familiar. Así respondía a la consulta de cuáles considera sus mayores éxitos en su vida profesional.
“En la parte profesional, en Alto Paraná, allá por el año 2000 empezamos a trabajar y nosotros nos propusimos llevar la parte administrativa de la mejor manera posible. Entonces sabíamos que se venía una reforma en la parte de contabilidad, una reforma contable y fiscal, por tanto, nos pusimos al día 2 años antes”, recordó.
Destacó que ese fue un trabajo muy grande y que fue de gran provecho. Gracias a él, pudieron acceder a créditos bancarios de mejor calidad. “Fue una transformación no solamente en la parte contable, sino administrativa. Culturalmente chocamos con lo que hacía mi papá, pero de a poco logramos, y una vez concretado fue muy bienvenido también por él, porque vio los beneficios”, afirmó con seguridad.
“Incorporamos nuevas tecnologías (…) me siento muy satisfecha con todo lo que hicimos”, celebró.
El segundo logro más importante para ella está en su Estancia en Agua Dulce. “Vino el desafío en el Chaco de formar una estancia y salir adelante con eso”. Sobre lo ya alcanzado en su empresa, recordó que en el 2023 recibieron un premio otorgado por la Mesa Paraguaya de la Carne Sostenible, lo que consideró como la muestra de que su esfuerzo por hacer las cosas bien, irrumpiendo de una forma no convencional, sino pensando en el futuro, vale la pena. “Para mi es el resumen de nuestro trabajo ese premio”, celebró.
Los desafíos de la mujer productora en el Chaco
En el Chaco la dificultad mayor es dejar a los hijos y la casa que uno tiene para llegar a la región, la falta de infraestructura, de caminos, hace difícil el acceso, comentó Candice. “Pero como la parte administrativa es llevada en Asunción, eso me permite hacer a distancia mi trabajo y basta con algunas visitas allá de vez en cuando. Para mi, la mayor dificultad es la distancia, la falta de caminos y la comunicación”, dijo.
La pasión se hereda pero también se enseña
Candice expresó que en una empresa familiar lo que más cuesta es darle continuidad, hacer la sucesión con las nuevas generaciones, lograr que los hijos tengan interés en continuar lo que los bisabuelos y abuelos empezaron.
“Yo te puedo decir que estamos logrando eso, porque ya nuestros hijos están queriendo ingresar al negocio familiar, ya se están interesando en estudiar carreras como las nuestras y para mí eso también es un logro demasiado importante, porque demuestra la sosteniblidad de nuestra empresa familiar”, afirmó.
Las mujeres paraguayas en el negocio agropecuario
“Yo veo que cada vez hay más mujeres y les siento muy seguras” dijo Candice al responder la consulta sobre la participación actual de las mujeres paraguayas en el sector de agronegocios.
Destacó que las mujeres aportan mucho “con nuestra inteligencia holística, nosotras cuando nos encargamos de un establecimiento ganadero, agroindustrial, nos preocupamos desde lo más mínimo hasta lo más grande, no nos focalizamos solo en la parte administrativa o los números, sino también la parte de recursos humanos, la parte ambiental, todo es importante para nosotras”, resaltó.
“Tenemos esa capacidad y yo creo que eso está siendo incorporado y es muy bien visto en todo el sector y yo le siento muy segura a las mujeres”, enfatizó.
Pero también comentó que hay mucho más que puede hacer la mujer con mejores herramientas, expresó su preocupación sobre todo por las pequeñas productoras, sugiriendo que el gobierno ponga énfasis en la inclusión de la mujer en lo que refiera a capacitaciones o mejoras programadas para el campo. A nivel crediticio, tecnológico, de formación, dijo : “cuanto más le ofrezcan capacitación a las mujeres, mejor nos va a ir”.
También le pedimos un mensaje para las mujeres que aman el campo y no se animan a empezar ese trabajo o se sienten limitadas para seguir creciendo.
“Mi mensaje para ellas es que se capaciten, buscar cursos online, buscar ayuda del gobierno y si no hay, buscar organismos que les pueda ayudar, usar la creatividad, la inteligencia natural de la mujer, darle un valor agregado a su producto, diversificar, no quedarse con lo mismo de siempre”, sugirió.
Candice invitó a las mujeres a no rendirse, a buscar ayuda y a unirse entre mujeres en la comunidad, el barrio, la región. “Porque yo creo que juntas podemos lograr muchas cosas”, cerró.
