Mantenerse “unidos, informados y alertas” es la estrategia propuesta por el gremio local para defender el sistema de producción paraguayo.
“No acompañaremos acuerdos, convenios, iniciativas, compromisos, cooperaciones internacionales que impliquen el freno al proceso de consolidación del desarrollo sostenible, amenaza a la producción de alimentos y otros productos agrarios, barreras artificiales al comercio y menoscabo de nuestro ordenamiento jurídico”.
Así se expresa la Unión de Gremios de la Producción (UGP) en un comunicado difundido masivamente en la semana a través de diversas plataformas y herramientas digitales invitando al sector productivo a unirse para defender nuestro sistema productivo.
Así, continúan diciendo: “Ante el Green Deal-UE, la estrategia para enfrentar ésta amenaza es mantenernos: unidos, informados y alertas para que ningún acuerdo, convenio, iniciativa o normativas unilaterales frene el desarrollo sostenible del país”.
El green deal o pacto verde de la Unión Europea incluye un conjunto de propuestas para adaptar las políticas del bloque sobre clima, energía, transporte y fiscalidad, que se plantearon con el objetivo de reducir las emisiones netas de gases de efecto invernadero en al menos un 55 % de aquí a 2030, en comparación con los niveles de 1990, según lo publica la misma Comisión Europea en su web oficial.
Los mismos agricultores europeos se manifiestan en contra de éstas medidas.
Debido al bajo volumen exportado desde Paraguay a la UE, la preocupación inmediata no se encuentra en los envíos a éste destino en específico, sino en que pueda alcanzarle a Paraguay el impacto desde otros mercados.
Los productores paraguayos han expresado su preocupación desde diferentes frentes y a través de diferentes gremios debido a que la trazabilidad exigida por la UE excluiría a los pequeños productores. El presidente de la UGP, el Ing. Hector Cristaldo, afirmó que sin problema, Paraguay puede generar herramientas de trazabilidad en conjunto y dar una respuesta demostrando su apuesta por la producción sostenible, pero no en los niveles exigidos por el bloque europeo porque en el acopio se reúne la soja de pequeños productores para alcanzar el volumen requerido por el mercado.
Refiriéndose a los pequeños productores, Cristaldo afirmó: “sobre ellos cae la bomba directo, nosotros tenemos asociados pequeños, medianos y grandes productores y vamos a ponernos firmes a su lado, no vamos a permitir que se les margine”. Aseguró que “Acá en Paraguay en 20 años redujo la pobreza del 57% al 24%, es una tendencia positiva de reducción de pobreza, y eso se logró gracias a la incorporación de tecnología y a que los pequeños productores entraron a la cadena de valor”, expresó, aclarando que no sería rentable para ellos seguir trabajando con granos.
Otro punto al que Paraguay no puede responder en el tiempo que está demandando la UE es la propiedad de la tierra, ya que justamente la agricultura familiar, trabaja en colonias en trámites de titulación que demoran años o en campos arrendados a través de comités o asociaciones.
Cristaldo sentenció con una incógnita la preocupación del agricultor paraguayo: “Entonces, la pregunta para la UE ¿ES SOSTENIBLE PARA ELLOS QUE EN PARAGUAY SE PROFUNDICE LA POBREZA?”
Pero la preocupación no sólo se encuentra en Paraguay, también en países vecinos como Argentina que ya planteó mediante un sistema de trabajo conjunto entre gremios de producción, agroindustrias y las bolsas de comercio de cereales la plataforma de trazabilidad VISEC, aún en construcción para responder a las demandas de la UE.
La Unión Europea parece no haber considerado siquiera a sus propios productores de alimentos. “Los agricultores europeos, que ya se enfrentan a las pérdidas económicas de la crisis climática, se manifiestan en contra de unas políticas ecológicas que consideran contradictorias, injustas y preocupantes para el futuro”, indica un reporte de euronews en español.
Francia, Alemania, Bélgica, Suiza y Países Bajos coincidieron con manifestaciones en las últimas semanas, pero ya desde el año 2023 se reportaron también manifestaciones en España y en el 2024 inclusive se reportaron movilizaciones de productores en Grecia.