El índice de precios de los aceites vegetales de la FAO registró un alza del 2,3 % respecto al mes anterior y 18,2 % respecto al mes de junio de 2024. El incremento fue impulsado principalmente por la suba de los precios de los aceites de palma, soja y colza, favorecida por una mayor demanda global, especialmente desde el sector de biocombustibles, y perspectivas de escasez en la oferta.
El índice de precios de los aceites vegetales de la FAO registró un promedio de 155,7 puntos en junio, lo que supone un aumento de 3,5 puntos (un 2,3 %) respecto del mes anterior y un 18,2 % por encima del nivel alcanzado en junio de 2024.
El aumento obedeció principalmente a la subida de los precios de los aceites de palma, colza y soja, que compensó con creces el ligero descenso de los precios del aceite de girasol. Los precios internacionales del aceite de palma subieron cerca de un 5 % en junio, impulsados en gran medida por la fuerte demanda mundial de importaciones en un contexto de mayor competitividad de precios.
Los precios del aceite de soja también subieron en junio, bajo la influencia de las expectativas de que aumentara la demanda de materias primas por parte del sector de los biocombustibles tras los anuncios de que se adoptarían medidas normativas de apoyo en el Brasil y los Estados Unidos de América.
Los precios del aceite de colza se reforzaron aún más por las expectativas de que la oferta mundial siga siendo escasa en 2025/26. Por el contrario, los precios mundiales del aceite de girasol disminuyeron debido al aumento de la producción previsto en la región del Mar Negro.