La piscicultura en Paraguay ha avanzado significativamente en los últimos años, ganando terreno como una actividad económica prometedora y sostenible. Según la experta, Dra. Susana Barúa, este crecimiento es fruto de un esfuerzo continuo por concienciar y educar a los productores sobre los beneficios y potencial de la cría de peces, que hasta hace poco era un concepto novedoso en el país.
Barúa recordó que en el pasado, la piscicultura era casi desconocida para muchos productores paraguayos. Sin embargo, con la implementación de programas de capacitación, el intercambio de experiencias y el creciente reconocimiento de su rentabilidad, la piscicultura ha comenzado a integrarse de manera notable en las comunidades a lo largo del país. Las bondades nutricionales del pescado, junto con la creciente demanda, han impulsado esta tendencia.
Actualmente, la piscicultura tiene una presencia destacada en la región oriental de Paraguay, con el mayor centro de producción ubicado en el departamento de Caaguazú. Este departamento se destaca como el mayor productor de alevines del país, con una significativa participación de pequeños y medianos productores que distribuyen sus productos en varias regiones.
Los departamentos de Itapúa, San Pedro, Misiones y Ñeembucú también están involucrados en la producción piscícola, y la actividad está empezando a expandirse hacia la región occidental. En esta área, la piscicultura se está integrando con otras actividades agrícolas y ganaderas, aprovechando los reservorios de agua disponibles.
En la región oriental, la piscicultura está presente en prácticamente todos los departamentos, y en Cordillera se encuentra un importante centro de producción de alevines, fruto de una cooperación del gobierno de Taiwán.
Evolución y Costos de Producción
Mientras que en el año 2000 la producción era de solo 200 toneladas, hoy en día alcanza aproximadamente las 19.000 toneladas anuales. Esta evolución ha sido posible gracias a avances en tecnología, la disponibilidad de insumos y la existencia de centros especializados en la producción de alevines porque según recordó Barúa, el principal inconveniente hace algunos años era la falta de alevines.
El costo de establecer una piscicultura varía según el departamento. En áreas con buena disponibilidad de maquinaria, como Itapúa y Alto Paraná, los costos pueden ser menores. En contraste, en regiones menos accesibles como Paraguarí o Cordillera, la inversión puede ser mayor. En promedio, se estima que iniciar un proyecto piscícola requiere una inversión inicial de alrededor de 4.5 millones de guaraníes, que cubre la construcción del estanque, el sistema de drenaje y la adquisición de alevines.
La Dra. Susana Barúa insistió en que la disponibilidad y calidad de los alevines es un aspecto crucial para el éxito de la piscicultura. En la actualidad, existen centros de producción en varios departamentos que garantizan la calidad de los alevines, como Caaguazú y Alto Paraná, además del Centro de Cordillera. Estos centros han sido fundamentales para superar el cuello de botella en la producción, permitiendo a los productores acceder a alevines con una genética adecuada y una buena tasa de crecimiento.
Además de la producción tradicional de pescado, la piscicultura en Paraguay está diversificándose con la creación de productos derivados. Las fábricas de alimentos están comenzando a incorporar pescado en sus productos, y la oferta se está ampliando a alimentos como nuggets, milanesas y hamburguesas de pescado. Esta diversificación no solo agrega valor a la producción piscícola, sino que también facilita su inclusión en la dieta diaria de los paraguayos. Otro negocio derivado que destacó la Dra. Barúa es la producción de balanceados.
Impacto Social y Económico
La piscicultura tiene un impacto significativo en los aspectos sociales, económicos y ambientales. No se requiere mucho espacio para producir una cantidad considerable de pescado, lo que permite a los pequeños productores contribuir a la seguridad alimentaria y al desarrollo económico local. La capacitación continua y la integración de la piscicultura con otras actividades agrícolas son clave para maximizar estos beneficios.
La piscicultura en Paraguay está experimentando un crecimiento notable y ofrece numerosas oportunidades para los productores y consumidores. Con una mayor conciencia sobre sus beneficios nutricionales y un desarrollo continuo en la calidad y disponibilidad de alevines, este sector tiene el potencial de convertirse en un pilar fundamental de la economía nacional y en una fuente de alimento saludable para la población.
