“Nos emociona ver cómo quienes pasaron por la asociación siguen con ganas de participar y colaborar, dejando huellas que hoy seguimos”, expresó Bruno Wasmosy, vicepresidente de la Asociación Paraguaya de Criadores de Nelore (APCN), en el marco del 60 aniversario de la institución. Este evento mostró la continuidad generacional y la transferencia técnica como elementos esenciales para la sustentabilidad y el desarrollo genético del Nelore en Paraguay, fortaleciendo el compromiso con la innovación y la capacitación permanente de las nuevas generaciones en el sector ganadero.
Con motivo del 60 aniversario de la Asociación Paraguaya de Criadores de Nelore (APCN), el vicepresidente Bruno Wasmosy expresó con emoción lo que significó reunir en un solo lugar a expresidentes, directivos y técnicos que marcaron historia en la institución. “Es un orgullo muy grande”, afirmó, recordando cómo esas personas que entregaron su tiempo y trabajo al gremio siguen hoy aportando con la misma pasión. “Nos emociona ver cómo quienes pasaron por la asociación siguen con ganas de participar y colaborar. Dejaron huellas que hoy nosotros seguimos”.
“Esa pasión y compromiso son un ejemplo para todos los que hoy estamos en funciones”, dijo. La idea nació con poco tiempo de preparación, pero con mucho corazón. Gracias al apoyo de auspiciantes, colaboradores y un equipo comprometido, se logró reunir a la familia Nelore en un evento cargado de historia, aprendizaje y proyección.“No fue fácil. Pero creemos que este congreso puede marcar el inicio de algo que perdure en el tiempo. No pensamos hacerlo cada año, pero sí repetirlo”, reflexionó.
El evento fue calificado como un verdadero éxito, tanto por la convocatoria como por el impacto generado a través de actividades presenciales y virtuales. “Las salidas de campo virtuales mostraron lo que es este congreso. No fue fácil organizarlo, pero valió la pena. Este podría ser el inicio de algo que perdure en el tiempo”, enfatizó Wasmosy.
Durante el congreso se destacó el valor de la continuidad generacional dentro del gremio. “Caminamos sobre las huellas que dejaron los que vinieron antes y tratamos de mostrar el camino a los más jóvenes, siempre con unidad, apertura y sentido de familia”, remarcó.
Ese espíritu de transmisión generacional, de legado vivo, es lo que la asociación busca consolidar. “Queremos que esto perdure por siempre, llegar a los 120 años con la misma visión. Que los más jóvenes sigan este camino, así como nosotros seguimos el de los que nos precedieron”, afirmó.
El vicepresidente también agradeció a todos los que se sumaron a esta iniciativa desde el primer día. “Fue una propuesta sobre la hora, pero recibimos un apoyo increíble. Desde los directivos de Brasil que se quedaron unos días más para compartir con nosotros, hasta los equipos de trabajo, los auspiciantes como el Banco Sudameris, y por supuesto, el público que confió y participó del evento. Todos fueron parte fundamental para lograr este ambiente tan especial que vivimos”, concluyó.